estuvimos en Agosto y fue genial pareciamos una gran familia todos los que estabamos alli alojados junto a Iris que es un encanto de mujer. Por las noches nos haciamos una barbacoas para cenar e Iris siempre nos acompañaba tomando un vinito y algo para picotear como el bonito del norte que ella hace en conserva que esta riquisimo. Nuestra hija de 5 años se lo paso genial con sus gatitos sus ocas , gallinas y pavo.Por la mañana junto otras amigitas iban a la casa de los vecinos a ver las vacas y los gansos y en busca de carcoles. Simplemente un 10 para la amabilidad de Iris y su entorno, y estar seguros que volveremos cuando tengamos algunos dias pues nos sentimos como en nuestra propia casa o mejor. Muchas gracias Iris y compañeros que conocimos en esa casa por hacernos pasar unos dias inolvidables