Mi pareja y yo estuvimos este puente de noviembre en uno de los apartamentos de la Brañela y aunke el tiempo no acompaño, lo pasamos genial.La casa preciosa y muy limpia y no le faltaba de nada, pero de nada, la dueña Lola majisima, tuvo muxisima paciencia porque llegamos de madrugada y alli nos estaba esperando, gracias por todo, sin duda volveremos un lugar ideal para descansar y desconectar del mundo.