Un lugar extraordinario, tranquilo y bien ubicado. Amaya es muy amable. Fuimos 4 adultos y 3 perros, y había espacio para todos. El jardín es perfecto. Repetiremos seguro. Muy cerca se encuentra la fábrica de galletas de la abuela, que también recomiendo. Ribadesella está muy cerca, lo que hace todo muy cómodo. Agradecemos a los dueños por su atención.