Un lugar delicioso, tranquilo, muy centrico para conocer la sierra de Cazorla y la de Segura, (que es casi más bonita y más salvaje), en plena naturaleza, con unos senderos señalizados junto al camping, al borde del pantano del Tranco, donde se observa mucha fauna. Ibamos a estar dos noches y nos quedamos cuatro, por que nos encantó.