Nuestra estancia fue fabulosa. Fuimos con nuestra gata que fue tan bien recibida como nosotras.
Los anfitriones son muy amables y atentos.
La ambientación en los años 20 esta muy cuidada y prestan atención hasta en los pequeños detalles, desde la música que puedes poner hasta los electrodomésticos que tienen.
Nos hemos ido con ganas de volver y probar otra de sus experiencias.
Los anfitriones son muy amables y atentos.
La ambientación en los años 20 esta muy cuidada y prestan atención hasta en los pequeños detalles, desde la música que puedes poner hasta los electrodomésticos que tienen.
Nos hemos ido con ganas de volver y probar otra de sus experiencias.