La casa tiene mucho encanto y es acogedora. El trato de la propietaria y luego de Maribel exquisito. El valle de Omaña es un descubrimiento. Repetiremos.
Una casa preciosa, en un entorno muy bonito, ideal para verano y también para disfrutra de la nieve, todas las comodidades, muy limpia, con una salón chimenea muy acogedor.A pesar de ir un fin de semana muy frio, la casa cuenta con buena calefación. Todas las facilidades para reserva y pago, muy muy recomendable, muy buena relación calidad precio y servicio.
una casa genial, un bonito lugar para perderse del ruido de la ciudad. muy limpia y cuidada, con todas las comodidades y equipamiento. la dueña y la encargada encantadoras. en definitiva para repetir.