Qué ver en Llanes

El Concejo de Llanes, bellísimo paraje asturiano, está ubicado en el extremo oriental del Principado de Asturias. Hasta la promulgación de su fuero, en 1.206, era conocido como territorio de aguilar, siendo objeto de disputa entre condes y potestades. De aquella época, todavía se conserva la belleza y la cordialidad de sus gentes.
Es hoy día uno de los mayores núcleos turísticos del norte de España. Su situación privilegiada, con más de treinta playas de fina arena, enclavadas en lugares de gran belleza natural, unido a su cercanía a los Picos de Europa y a su valioso patrimonio cultural, han convertido este Concejo en cita obligada para miles de visitantes que, año tras año, se acercan a esta tierra para disfrutar de su gastronomía, folclore y del trato con sus gentes.
La Villa de Llanes, capital del Concejo adquirió la calidad de "Villa" en el pirmer tercio del siglo XIII como consecuencia del otorgamiento del Fuero. Con una población aproximada de 3.800 habitantes, posee numerosos atractivos que difícilmente pueden describirse uno a uno.
El Paseo de San Pedro, el de San Antón, el río Carrocedo y el Puerto son los ejes sobre los que se levanta esta villa, en otro tiempo importante puerto pesquero y ballenero.
Ofrece al aspecto de una villa histórica, los amantes del arte disfrutan de su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico-Artístico, conserva aún importantes muestras de arquitectura civil, religiosa y militar. Entre otros monumentos cuenta con unos 300 metros de muralla románica, Torreón de Defensa (hoy convertido en Oficina de Turismo), la Basílica de Santa María del Conceyu, el Palacio de Gastañaga o el de Posada Herrera, hoy convertido en Casa Municipal de Cultura.
La importante actividad pesquera y el paso de una de las variantes del Camino de Santiago convirtió a Llanes en un enclave económico y cultural de singular interés. Los palacios y casonas de las grandes familias como el Palacio de Gastañaga, de los Duques de Estrada, Casa del Cercáu, la antigua casa de Posada-Herrera, hoy convertida en Casa de Cultura, etc pueden admirarse como símbolos de la importancia que llegó a adquirir Llanes.
El paso del tiempo ha ido añadiendo a la villa notas arquitectónicas de signo distinto, pero igualmente esplendorosas, como el Ayuntamiento y el Casino, en la calle principal de la villa, o las casas de los que volvieron enriquecidos de las Américas (las Casonas de los Indianos), como las que flanquean a ambos lados la Avda. de la Concepción.
Para los que gusten de espacios naturales, nada como una tranquila caminata por el Paseo de San Pedro, que tras las ampliaciones discurre a lo largo de mas 800 metros bordeando acantilados y que al tiempo sirve de verdadera atalaya sobre la villa y el Cantábrico, o bien por el paseo de San Antón, que comenzando en el muelle, se extiende hasta el puerto pesquero ampliado y mejorado recientemente, y que continúa hasta la llanisca playa de Puerto Chico; aquel que lo desee podrá extender su paseo hasta la playa de Toró, donde la erosión ha ido creando numerosas rocas de caprichosas formas. Aún resta otro paseo que une la Villa de Llanes con el vecino núcleo de Poo.
En lo que a servicios se refiere, la villa cuenta con un Centro de Salud estatal y otro privado, programas de seguridad ciudadana y vigilancia en playas, y que se completa en el apartado de ocio con un Polideportivo Municipal, donde se pueden encontrar pistas de tenis, baloncesto, badminton, etc., y el Campo de Golf Municipal tipo Link Escocés (de 18 hoyos). El resto del Concejo cuenta con unos 10.000 habitantes más, repartidos entre los numerosos núcleos de población existentes. Todas y cada una de sus playas y calas merecen una visita, así como sus pueblos costeros y de interior. Desde algunos de los situados en la sierra del Cuera, pueden admirarse tanto los Picos de Europa como el Naranjo de Bulnes.