Qué ver en La Codoñera
La Codoñera se abre en el espacio enarbolado por el marco del horizonte, absolutamente identificada con el Bajo Aragón. La voluntad de sus gentes ha ido modelando el paisaje rural y urbano. Sus calles discurren por un perfil llano, y en la disposición de sus casas se manifiesta el legado histórico de sus antepasados. En 1179, Alfonso II encomienda a la orden de Calatrava la repoblación del territorio. En el S. XIV se funda la Cofradía de Santa María y San Valero, con estatutos y fuero administrativo y judicial.
Entre 1327 y 1414 la Codoñera fue propiedad privada de la familia Sessé. En 1776, Carlos III la eleva a la categoría de Villa y se la separa de la jurisdicción de Alcañiz.
En 1280 se inicia la construcción de la Iglesia Parroquial de Santa María, bajo la advocación de la Asunción de Nuestra Señora al Empíreo. Magnifico edificio de estilo gótico construido en piedra arenisca y mampostería. También destaca la ermita de la virgen del Loreto compuesta por una sola nave en forma de cruz latina, esta construida en piedra de cantería y su estilo es neoclásico.
La balsa del municipio es una excelente obra hidráulica para recoger las aguas de lluvia de toda la ladera del cabezo donde esta situada la ermita de Santa Barbara.
Todavía se puede recorrer en antiguo canal que conducía la escorrentería de las aguas hasta la balsa. No hace mucho aún se empleaba para abrevar al ganado y a las caballerías.
Aquí todavía se conserva en buenas condiciones, mientras que en otras poblaciones se han utilizado para otros menesteres, o simplemente han quedado llenas de lodos al no limpiarse.
