Los orígenes del municipio de La Rincona, hoy Villanueva de Algaidas, se remontan al siglo pasado y a la época en que el duque de Osuna dueño de estos parajes, autorizó a la congregación de los padres franciscanos la construcción de un convento penitenciario junto al arroyo Burriana. Alrededor de este convento fueron surgiendo pequeñas viviendas de los colonos que cultivaban las tierras.
Dada la diversidad de cultivos existentes en este término, paulatinamente fueron apareciendo núcleos de población en varios puntos del mismo. Así tuvieron su origen los de Atalaya, Zamarra, Albaicín, Parrilla, Barranco del Agua y el principal de La Rincona. Al conjunto de todos ellos se le denominó posteriormente Villanueva de Algaidas.
Las ruinas del convento de los padres franciscanos es lo único que hay en el pueblo como edificio de interés histórico y artístico, además del atractivo que tiene la cueva de la Sierra de Arcas.