Qué ver en Santibañez El Alto

Situado el núcleo sobre la cúspide de un empinado cerro que se eleva en medio de una llanura. Esta situación hace famoso al pueblo al poderse observar desde las lejanas vegas; también la presencia del embalse de Borbollón, en cuyas aguas se refleja la blancura del núcleo, resalta la belleza del mismo. Lógicamente el término es muy accidentado. Destacando los cerros de Rumillera y Martín. Más del 25 por 100 de las tierras presentan pendientes superiores al 20 por 100.

Bañan el territorio municipal el río Arrago y Tralgas y numerosos arroyos. Se encuentra en el término sobre el río Arrago el embalse de Borbollón.

El clima es de tipo mediterráneo continental templado. La temperatura media anual es de 14,5ºC. Los inviernos suelen ser suaves, con una temperatura media de 7ºC, alcanzando las mínimas absolutas valores de -4ºC. El verano es seco y templado con una temperatura media estacional de 24,5ºC y unas máximas absolutas que alcanzan los 37ºC. La precipitación media anual supera los 1.000 mm. La estación más lluviosa es el invierno (400 mm.) y la más seca el verano (60 mm.). La formación fisiognómica predominante en estado natural es la aestilignosa, caracterizada por la presencia de castañares, robledales, alcornocales, junto a otras especies que componen el matorral: brezo, madroñeras, tojo, aulaga, etc.

La tasa de actividad en 1986 es del 39,7 por 100. En la distribución por sectores se aprecia un predominio del primario y del sector servicios. La superficie labrada representa sólo el 20,3 por 100 del término municipal. Entre los cultivos destacan el olivar (626 ha.) y los herbáceos (1.416 ha.). El resto del territorio (80 por 100) tiene una dedicación ganadera al estar conformado en su mayor parte por prados y pastizales; y forestal (18 por 100). Entre las 1.027 Unidades Ganaderas censadas, sobresale el bovino (695). Desde el punto de vista turístico el núcleo es muy importante; presentando en su término uno de los pocos Camping de Sierra de Gata.

Esta villa se llamó antiguamente de San Juan, como señala P. Madoz: el obispo de León, Froila, por su testamento otorgado en 1002, dio a la iglesia una heredad en San Juan, comprada por Benito Gallego y Justo de Navafría. Tomó esta población el apellido de Mascoras. Después se vino a llamar Santibáñez de Mascules y últimamente el Alto. Es patria de Juan Gámez del Águila que dejó varias fundaciones piadosas.