Esta localidad es capital del concejo de Tineo, situado en el centro de la zona occidental y segundo en extensión de Asturias.
Hay restos que atestiguan la presencia humana con mucha anterioridad a la llegada de los romanos, los cuales explotaron la riqueza minera y especialmente el oro en la zona de Navelgas y Cerredo. La importancia de la colonización romana fue muy grande, prueba de ello son los abundantes hallazgos arqueológicos correspondientes a esta época: estelas mortuorias, acueductos, lápidas votivas, aras, redes viarias ...
Fueron los romanos los que sobre un viejo castro levantaron la civitas, con fortaleza y centro administrativo, que más tarde se convertiría en la villa medieval de Tineo, a la cual el rey Alfonso IX concedería en 1.222 el fuero de "pobla real". En la Edad Media, es también de destacar la fundación de los monasterios de Obona y Bárcena, de gran importancia en la ruta jacobea del Occidente interior asturiano.
En la Edad Moderna destaca la figura del Conde de Campomanes, nacido en Sorriba, que llegó a alcanzar las más altas magistraturas en la vida nacional; y en la Contemporánea fueron varios los personajes que alcanzaron gran notoriedad: Rafael del Riego, nacido en Tuña, general liberal que murió ajusticiado bajo el reinado de Fernando VII; Santiago Fernández Negrete, nacido en Villatresmil en 1.799, llegó a ser ministro de Fomento, Gracia y Justicia; José Maldonado, nacido en Tineo, último presidente de la II República en el exilio.
En la villa se pueden admirar: La iglesia parroquial, del siglo XIII; la casa-palacio de los Tineo y Maldonado, del siglo XIV -actualmente Casa de la Cultura-; los restos del antiguo hospital de peregrinos Mater Christi, del que únicamente se conserva la capilla, también del siglo XIV; el Palacio de Merás, del siglo XVI, ubicado en la plaza central de la villa; y el Museo de Arte Sacro, anexo al templo paroquial de San Pedro de Tineo.