Qué ver en A Cañiza

Una tierra de montañas. Esta podría ser la mejor descripción de A Cañiza, una zona con una orografía en la que se reúne la alta y la media montaña y la ribera, dibujando una forma siempre irregular adornada por el verde de los bosques y montes. En cada uno de los diferentes paisajes cambia también la vegetación. La zona alta está formada por pinos, carquesias, brezos y tojos; en la zona media habitan robles, pinos, eucaliptos, castaños, alcornoques, alisos y sauces. En la ribera se cultiva la vid y los árboles frutales, principalmente naranjos y limoneros.
Los ríos Deva, Ribadil y Umia posibilitan la abundancia de cañadas para el riego, que abastecen las tierras de los vecinos. Las horas de riego pueden comprarse y venderse, siendo los vecinos más favorecidos los que viven en la parte alta de las presas, que tienen derecho al agua.
La agricultura, el ganado y la explotación forestal son las principales formas de subsistencia de los habitantes de A Cañiza, una tierra rica en producción de cereales, vino, miel y productos de la huerta. Los ganaderos crían ganado vacuno, lanar, porcino y avícola, mientras en las montañas se crían caballos y asnos en estado salvaje. La producción industrial se centra en la explotación de molinos de agua y eléctricos, aserraderos y talleres mecánicos y de carpintería. Por su situación entre Vigo y Ourense está creciendo también la industria de la hostelería y el comercio en general.
Como puntos de interés turístico destacan la fortificación de As Achas, que servía de refugio en caso de invasiones, el Coto de Castro y el Coto de las Cavadas, y restos de castros, algún dolmen y esculturas rupestres. Entre sus iglesias destacan la de Parada das Achas (1891), la de A Cañiza (1902) y el Santuario de la Virgen de A Franqueira.