Casas rurales en Agüerina, Asturias

El Molino tiene dos alturas, en la planta baja un amplio salón con chimenea, comedor y cocina y en la primera planta, dos habitaciones dobles cada una con su cuarto de baño. La habitación matrimonial dispone además de una galería de madera acristalada y balcón sobre el río. El molino de Valdelagua tiene la clasificación de Tres Triqueles, (máxima categoría concedida por el Principado de Asturias a esta modalidad de alojamiento).. Las casas rurales formaban antiguamente un conjunto de aprovechamiento hidráulico compuesto por un molino del siglo XVIII y una pequeña fábrica de luz. Todos los edificios han sido cuidadosamente rehabilitados, con materiales autóctonos, piedra caliza y madera de castaño, conservando su estructura y carácter originales. Las casas están situadas a orillas del truchero río Pigüeña, en una finca muy tranquila, separada del pueblo, con bosque autóctono, zonas para pasear, relajarse junto al río o incluso bañarse en verano.

Ideal para dos personas, la entrada da paso a una cocina completa y a un confortable salón con chimenea. En la parte superior está la habitación matrimonial y el baño, ambos con techo abuardillado de madera de castaño. Las casas están situadas a orillas del truchero río Pigüeña, en una finca muy tranquila, separada del pueblo, con bosque autóctono, zonas para pasear, relajarse junto al río o incluso bañarse en verano. . Las casas rurales formaban antiguamente un conjunto de aprovechamiento hidráulico compuesto por un molino del siglo XVIII y una pequeña fábrica de luz. Todos los edificios han sido cuidadosamente rehabilitados, con materiales autóctonos, piedra caliza y madera de castaño, conservando su estructura y carácter originales. Las casas están situadas a orillas del truchero río Pigüeña, en una finca muy tranquila, separada del pueblo, con bosque autóctono, zonas para pasear, relajarse junto al río o incluso bañarse en verano.

Tiene una planta de 700 m2. La entrada se hace por un amplio zaguán, que da acceso al espectacular patio con columnas de piedra y salida hacia la finca y el río. desde el zaguán, por una señorial escalera se accede al corredor del piso principal donde se hayan las estancias nobles del Palacio, salón, amplias habitaciones, 7 dormitorios, alegres galerías acristaladas y cocina que sorprende por sus grandes dimensiones y magnífico llar. La finca del palacio con más de 1 hectárea, es ideal para disfrutar de la naturaleza, tiene pomaradas y otros árboles frutales, destaca el apacible jardín con terraza, porche y cenador.. Las casas rurales formaban antiguamente un conjunto de aprovechamiento hidráulico compuesto por un molino del siglo XVIII y una pequeña fábrica de luz. Todos los edificios han sido cuidadosamente rehabilitados, con materiales autóctonos, piedra caliza y madera de castaño, conservando su estructura y carácter originales. Las casas están situadas a orillas del truchero río Pigüeña, en una finca muy tranquila, separada del pueblo, con bosque autóctono, zonas para pasear, relajarse junto al río o incluso bañarse en verano.