Estuvimos un fin de semana de octubre, un grupo de amigas con niños. Desde el primer momento la atención del anfitrión, Luis, fue muy agradable, cercana y facilitadora. Nos sugirió hasta sitios cercanos donde comprar comida. la casa es fantástica y se nota que ha sido y es disfrutada por los dueños, es muy acogedora y el comedor es fantástico. Fue el primer fin de semana de frío de este otoño y la calefacción nos proporcionó confort en todo momento. Qué pena que la lluvia no nos permitiese disfrutar del porche y el jardín.
Volveremos, seguro.
Volveremos, seguro.