Sencillamente espectacular en todos los sentidos. La casa está muy cuidada, equipada con todo lo necesario y más, todo nuevo. La limpieza sobresaliente. Nos hemos sentido como en casa. El entorno envidiable. Tranquilidad. Espacio suficiente para los 16 que hemos llegado a estar. Y por si fuera poco, el propietario, Fernando, super servicial. Atento a todo. Un fin de semana ideal sin ningún inconveniente. Ha sido toda una experiencia. En fin, repetiremos en cuanto podamos.