Estuvimos un fin de semana 2 parejas con niños, en otra casa de la familia: "Piedra gorda".
El entorno super tranquilo. Los niños disfruraron mucho, ya que había burros muy cerquita y además pudieron disfrutar de los animales de la granja familiar: vieron ordeñar vacas, había terneros, dieron biberón a los corderos...Nos dieron leche recién ordeñada y sobaos, un detalle de agradecer., La dueña, Ana, muy atenta en todo momento y su marido y toda la familia encantadores!!
Muy recomendable si se busca tranquilidad y contacto con los animales y la naturaleza.
El entorno super tranquilo. Los niños disfruraron mucho, ya que había burros muy cerquita y además pudieron disfrutar de los animales de la granja familiar: vieron ordeñar vacas, había terneros, dieron biberón a los corderos...Nos dieron leche recién ordeñada y sobaos, un detalle de agradecer., La dueña, Ana, muy atenta en todo momento y su marido y toda la familia encantadores!!
Muy recomendable si se busca tranquilidad y contacto con los animales y la naturaleza.