El Prado de la Romia es otra historia.
Hace varios años nos enamoramos de Asturias y año tras año volvemos, pero nunca nos habíamos alojado en un lugar tan mágico.
El entorno es clave, cerca de todos los lugares de interés, mar y montaña.
La casina: impecable en cuanto a orden y limpieza; equipada con todo lo necesario para que tu maleta sólo viaje con ropa.
El patio: un súper amplio, cuidado y verde trocito asturiano donde mis hijos pudieron disfrutar de ratitos de juego en plena naturaleza.
Desayunar bajo su hórreo ( panera en realidad) contemplando el mar es el momento que necesitáis experimentar.
Gracias Vicente por este idílico lugar que esperamos disfrutar muy pronto si nos dejas.
Hace varios años nos enamoramos de Asturias y año tras año volvemos, pero nunca nos habíamos alojado en un lugar tan mágico.
El entorno es clave, cerca de todos los lugares de interés, mar y montaña.
La casina: impecable en cuanto a orden y limpieza; equipada con todo lo necesario para que tu maleta sólo viaje con ropa.
El patio: un súper amplio, cuidado y verde trocito asturiano donde mis hijos pudieron disfrutar de ratitos de juego en plena naturaleza.
Desayunar bajo su hórreo ( panera en realidad) contemplando el mar es el momento que necesitáis experimentar.
Gracias Vicente por este idílico lugar que esperamos disfrutar muy pronto si nos dejas.