Malanquilla es una pequeña población de Aragón que está situada junto a la carretera Nacional 234, casi a mitad de camino entre Soria y Calatayud
La tradición oral popular dice que en tiempos hubo una gran ciudad llamada "Malanca". Pero tras sobrevenir una guerra quedó tan reducida que pasó a llamarse "Malanquilla". Esta tradición mezcla cosas de distintos lugares y épocas. "Malanca" es un prado entre los términos de Torrelapaja y Berdejo. En este paraje existía antiguamente una ermita dedicada a la Virgen de Malanca, cuya talla románica (siglo XII) se conserva en la iglesia parroquial de Torrelapaja, de la que es titular la Virgen, también copatrona de la localidad junto a San Millán..
El topónimo "Malanca" es de terminación céltica y pudo corresponder en origen a un poblado celtíbero, después romanizado, que hubo en la cima de Los Aguilares. Allí se han encontrado restos de muros y fosos defensivos, cerámicas, molinos de mano y alguna moneda ibérica. Los historiadores han descartado completamente que fuera la ciudad celtíbera de "Malia", involucrada en la Guerra de Numancia (141 AC).
Malanquilla siempre fue pueblo de limitada población a lo largo de la historia. Esto queda demostrado por los censos que se conservan desde 1367. Incluso llegó a despoblarse por entero en 1429, no empezando su población a estabilizarse hasta finales del siglo XV. Malanquilla jamás fue "villa". Desde que en 1338 empieza a citarse, figura siempre como "lugar". Posiblemente hay que buscar el orígen de nuestro pueblo en la repoblación de los siglos XII-XIII tras la conquista de la comarca por Alfonso I, el Batallador. Durante los siglos XIII y XIV en su actual término municipal hubo diversos pequeños poblamientos o aldeas como Calderola (la Casa de los Moros), Cerradilla, Valdeperilla, las Casas,... ninguno de los cuales sobreviviría a la Edad Media.
En cuanto a sus fiestas habría que destacar la de la Virgen de la Asunción,la cruz de Mayo, San Sebastián y San Sebastianico, San Mateo, San Antón, El jueves lardero,Semana Santa, Los Carnavales, las fiestas tienen como una función de aglutinador social.