Se encuentra en Estella, Navarra. Está ubicada en pleno casco urbano de la ciudad, en la Rúa de los Peregrinos. Su construcción se remonta al año 1123, es considerada la iglesia más antigua de la ciudad. En un principio fue sede de la cofradía del Santo Sepulcro.
La importancia de esta iglesia reside en su estructura y en los elementos arquitectónicos que lo componen, sobresalientes por los detalles del arte románico tardío que lo decoran. Las arquivoltas góticas dotan a la construcción de un carácter eclecctico motivo de muchas visitas.
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