Qué ver en Sober

De la época megalítica quedan vestigios en las diversas mámoas esparcidas por todo el término municipal, al igual que de los restos de la cultura catreña en los numerosos castros existentes: Castinande y Agro en Anllo, O Cotarro do Castro en Bolmente, A Mola en Brosmos, O Castro y O Castelo en Doade, etc.

De época romana es el yacimiento de Proendos cuyos hallazgos se depositaron en el Museo Provincial, también se encontró un ara en Liñarán con la siguiente inscripción: "Cayo Julio César Hispano pagó gustoso en justicia el voto a los Lúguves Arquenios". Continuando con el devenir histórico de Sober, de la presencia sueva quedan topónimos como Viloudriz, Viloriz, Sanmil, Recemil, Vixilde, Rosende, etc. En el año 785 Odoario fundó la villa de Amandi con su iglesia.

Durante la Baja Edad Media se fundaron varios cenobios, estos centros monacales contribuyeron a denominar esta zona de las riberas del Sil y del Miño, como "Ribeira Sacra" ya desde el siglo XII. Las barcas del Sil con las que se comunicaba la comarca de Lemos con Ourense suponían rentas para los monjes de Sto. Estevo de Ribas do Sil, en Sober las había en Porta Brosmos en Pinol, Xabrega en Anllo, Santomé de Anllo,etc. El linaje de los López de Lemos tiene su casa solar en Sober y aparecen en la historia de este ayuntamiento a partir del siglo VIII. A lo largo del siglo XV aparece mucha documentación en el archivo de San Vicente del Pino sobre ventas, donaciones y demás. Hasta el siglo XVIII varias familias hidalgas ejercieron su poder en tierras de Sober, además de los Lemos, aparecen los Ulloa y Villoa, Valcárcel, Somoza, Ozores, Gayoso, Montenegro, Losada...

A principios del siglo XIX Sober sufrió también la invasión napoleónica.