La casa es un hotel rural y cada habitación tiene su propio baño lo que está genial.
Carlos, el dueño nos trató muy bien y fué muy paciente, algo que hay que agradecer.
La casa está muy bien equipada, con dos frigoríficos, una cafetera estupenda grande y mucho espacio para todos y sobre todo para los niños.
Como incoveniente mencionar las luces de servicio de las habitaciones que son muy luminosas y dificultan dormir cómodamente (no se pueden apagar, lógicamente), algunas están tapadas de mala manera con un cartón en algunas habitaciones, pero es algo que supongo se podrá solucionar fácilmente.
Tuvimos mala suerte, llovió todo el fin de semana y en una de las habitaciones salió una gotera, menos mal que nos sobraban habitaciones y pudimos movernos a otra. Se lo notificamos a Carlos y estamos seguros de que le pondrá remedio en breve.
Nos avisó que el lavavajillas no funciona correctamente, no limpia bien y no seca la vajilla, pero también está en ello para solucionarlo en breve.
Hemos estado un grupo de 16 personas en esta casa rural y comentar que es muy espaciosa, está todo muy nuevo, con todo tipo de comodidades y que el dueño es encantador. Muy recomendable
Somos una grupo de 17 personas. La casa nos ha encantado, amplia, nueva, completamente equipada, perfecta para grupos.
Todas las habitaciones tiene baño, la cocina está completa (una cafetera genial, lavavajillas), chimenea en el salón. También hay un futbolín y unos dardos en una zona de juegos.
El dueño tuvo el detalle de regalarnos huevos de sus gallinas biológicas y miel de roble. Fue muy simpático y nos explicó todas las actividades que podíamos hacer por la zona.
También fue importante el hecho de que no tuvimos horario de salida y aprovechamos el día completo.
La recomendamos completamente, ya que además tiene muy buen precio.
Hemos estado este fin de semana y todo muy bien .La casa muy bonita y muy cómodas las camas hemos estado la cuadrilla (20 personas )El pueblo bonito.Una casa espectacular.Recuerdos a Carlos.
La casa es ideal, todo nuevo y con todo nivel de lujos. El pueblo, muy pequeño, totalmente rural, su localización es totalmente estratégica para visitar Burgos, Aranda, Covarrubias, etc. Pero lo mejor es el trato de Carlos, en vez de alojados, parecía que estabamos en casa de un amigo pasando unos dias. Han sido unos dias inolvidables, y sin duda volveremos. Totalmente recomendable, especialmente a grupos grandes.
Carlos, el dueño nos trató muy bien y fué muy paciente, algo que hay que agradecer.
La casa está muy bien equipada, con dos frigoríficos, una cafetera estupenda grande y mucho espacio para todos y sobre todo para los niños.
Como incoveniente mencionar las luces de servicio de las habitaciones que son muy luminosas y dificultan dormir cómodamente (no se pueden apagar, lógicamente), algunas están tapadas de mala manera con un cartón en algunas habitaciones, pero es algo que supongo se podrá solucionar fácilmente.
Tuvimos mala suerte, llovió todo el fin de semana y en una de las habitaciones salió una gotera, menos mal que nos sobraban habitaciones y pudimos movernos a otra. Se lo notificamos a Carlos y estamos seguros de que le pondrá remedio en breve.
Nos avisó que el lavavajillas no funciona correctamente, no limpia bien y no seca la vajilla, pero también está en ello para solucionarlo en breve.
Por lo demás, todo genial, muy contentos.