Casas rurales en Muniáin De Guesálaz, Navarra

Hilaris

Nos alojamos el fin de semana del 1 al 3 de marzo tres familias con dos hijos cada una adolescentes y preadolescentes.

Decir que Andrés que fue la persona de contacto antes de llegar, nos resolvió cualquier duda que le escribimos por whatsapp y estuvo muy atento igual que a la llegada que fue un buen anfitrión y nos enseño la casa de arriba abajo y dando explicaciones de todo.

La casa en si es del siglo XVI preciosa hecha de piedra y mucho más grande que lo que parece en las fotos de la pagina web, que por cierto pone para 12 personas pero perfectamente caben más.

Totalmente equipada con todo lo que os podáis imaginar, nosotros que somos cocinillas no nos falto nada para poder cocinar para 12 personas como por ejemplo rancheras, paelleras, ruedas de butano y todo tipo de menajeria.

Nosotros nos decantamos sobre todo que es por lo que le hace diferenciarse un poco en otras, por el jacuzzi grande de 6 personas, la barbacoa ( que por cierto nos dejaron carbón ) , por las chimeneas de la casa provistas de toda la leña que quieras y sobre todo por una mega sala impresionante de juegos para los hijos con varios cañones de aire caliente.

Las habitaciones son correctas y destacaría las almohadas y los colchones ya que con la edad nos hacemos más raros dormir fuera de casa y sin embargo todos estuvimos de acuerdo que dormimos muy bien, mucha ropa de cama y muy calentitas las habitaciones, por poner un pero que mucha gente igual está en contra, yo pondría televisiones, cuando vas con mucha gente que igual también te gusta echarte la siesta con los leones de la 2 y no en el salón principal con todos jajajajaj.

Los baños muy amplios, hay 4 suficiente para no pelearte por entrar cuando sois muchos y uno de ellos con una gran bañera de hidromasaje.

El comedor muy amplio con chimenea, sofá tremendo, barra de bar y televisión (no es smart tv, es un poco antigua y creo que esta casa se merece lo mejor)

El entorno es muy tranquilo con mucha variedad de rutas para andar, el pueblo es muy pequeño y tiene un bar muy pequeño que solo abre unas horas pero es solo para los del pueblo así que llevaros bien de bebidas jejejeje.

En definitiva que es una pasada de casa con el jacuzzi y la sala de billar, futbolín, ping pong porque da muchísimo juego.

Nosotros repetiremos seguro.

Por poner algo “malo” que si no van a pensar que soy el dueño es que estaba estropeado el wi-fi y los más jóvenes lo echaron mucho de menos también tenían que poner amplificadores de señal porque solo se podía hablar por teléfono en una esquina de la casa y yo que estuve medio trabajando fue un poco problema.

Alberto Eguizábal