Hemos celebrado aquí las bodas de oro de nuestros padres, con todas las precauciones del mundo debido a la situación actual, pero ha sido un fin de semana memorable. Las casas están fenomenal, muy funcionales, espaciosas, con barbacoa exterior, decoración muy bonita, la pena la piscina, que por la época no la hemos podido usar. A un paso de Zamora. Pero lo mejor son los propietarios, tanto Pepi como su marido han sido encantadores, en todo momento pendientes de cualquier cosa que nos pudiera hacer falta. Muchísimas gracias a los dos, han hecho que el fin de semana sea redondo.