Nuestra estancia fue de una semana. El entorno espectacular, ambiente tranquilo, silencio absoluto y paz. Dentro de la casa esperábamos más detalles,en cuanto a los enseres,daban la sensación de muy usados y viejos. La decoración dentro del caserio está descuidada.
Por otro lado,el trato con la dueña (que vive justo en la misma casa) muy amable,atenta y detallista.
Ha sido una semana preciosa.
Por otro lado,el trato con la dueña (que vive justo en la misma casa) muy amable,atenta y detallista.
Ha sido una semana preciosa.