Hemos hecho un viaje con amigas y los caseros nos han tratado fenomenal, nos hemos sentido como en casa, la estancia muy limpia y acogedora, y encantadas con la visita a la bodega tradicional con una cata de buen vino y queso en un pueblo muy tranquilo y bonito muy cerca de Valladolid ciudad, ya tenemos ganas de volver!