Un finde espectacular. La casa muy acogedora está aquí equipada con todo lo necesario como si estuvieras en tu propia casa. Las camas muy cómodas y con el canto de las ranas y el sonido del agua se coge el sueño rápido! La dueña muy amable y simpática con muchos detalles. Para mí un 12 . Gracias por todo Mónica