Estuve con mi pareja y nuestras dos perras la semana del puente de diciembre.
Cosas buenas: Casa situada en un lugar precioso, muy bien comunicada de la costa, Francia e interior. Estuvimos en el piso de abajo, con entrada muy cómoda desde el parking. Dueños atentos y educados.
Cosas no tan buenas: por dentro vieja y desgastada. Tanto el mobiliario, como desde luego el menaje de cocina y baño y sobre todo los colchones y ropa de cama. Uno de los 2 baños lo tuvimos que cerrar porque olía realmente mal toda nuestra estancia.
Aspectos a tener en cuenta: quizá no sea una buena opción si buscas tranquilidad y silencio. A nosotros nos tocó un grupo de 10 personas en el piso de arriba y no pudimos pegar ojo la primera noche que llegaron. Pese a decírselo a los dueños, nos dijeron que “no podían hacer nada”, y la tarde siguiente, viendo “la que se preparaba” con otros tantos que llegaron, decidimos regresar 2 días antes de tiempo. Una pena que quien causa el ruido y jaleo se quede (porque son “10 pagando frente a 2”), y el que lo sufre, tenga que salir pintando, simplemente porque quiere dormir.
A nuestro juicio injusto y lamentable.
Asimismo lamentable querer cobrarnos el 40% del día en que nos tuvimos que ir, para poder evitar el jaleo, y lamentable el mensaje cuando estábamos de camino, para que nos trajésemos papel higiénico, jabón de fregar y servilletas de papel. En nuestra experiencia y por el precio que pagamos, eso lo pone la casa,, que no vale nada, por dios.
Estuve con mi pareja y nuestras dos perras la semana del puente de diciembre.
Cosas buenas: Casa situada en un lugar precioso, muy bien comunicada de la costa, Francia e interior. Estuvimos en el piso de abajo, con entrada muy cómoda desde el parking. Dueños atentos y educados.
Cosas no tan buenas: por dentro vieja y desgastada. Tanto el mobiliario, como desde luego el menaje de cocina y baño y sobre todo los colchones y ropa de cama. Uno de los 2 baños lo tuvimos que cerrar porque olía realmente mal toda nuestra estancia.
Aspectos a tener en cuenta: quizá no sea una buena opción si buscas tranquilidad y silencio. A nosotros nos tocó un grupo de 10 personas en el piso de arriba y no pudimos pegar ojo la primera noche que llegaron. Pese a decírselo a los dueños, nos dijeron que “no podían hacer nada”, y la tarde siguiente, viendo “la que se preparaba” con otros tantos que llegaron, decidimos regresar 2 días antes de tiempo. Una pena que quien causa el ruido y jaleo se quede (porque son “10 pagando frente a 2”), y el que lo sufre, tenga que salir pintando, simplemente porque quiere dormir.
A nuestro juicio injusto y lamentable.
Asimismo lamentable querer cobrarnos el 40% del día en que nos tuvimos que ir, para poder evitar el jaleo, y lamentable el mensaje cuando estábamos de camino, para que nos trajésemos papel higiénico, jabón de fregar y servilletas de papel. En nuestra experiencia y por el precio que pagamos, eso lo pone la casa,, que no vale nada, por dios.