Todo perfecto, la casa súper acogedora y limpia, vallada completamente, que nos encantó para que nuestras perras disfrutarán al igual que nosotros, la dueña un encanto, nos explicó todos los detalles,y nos aconsejó rutas de senderismo y visitas guiadas, también pudimos degustar sus naranjas en ricos zumos para desayunar y sus mandarinas deliciosas, repetiremos sin duda.