Estuvimos hace años y hemos vuelto dos adultos y cinco niños la primera semana de enero. Está situada en un entorno precioso con unas vistas espectaculares. El salón de juegos la planta alta, la chimenea en el centro del salón, la barbacoa y el horno de leña exterior, lo mejor de la casa. El dueño Jesús, ha estado pendiente durante nuestra estancia por si surgía algún problema. Volveremos con toda seguridad.