Es un lugar espectacular, con naturaleza de belleza incomparable, un abanico de actividades que se puede hacer y con dueños cariñosos que tratan a sus invitados como sus mejores amigos. Las casas son muy lindas de estilo autentico portugués, encantadoras por fuera y por dentro. Hemos pasado muchos días felices allí y seguimos volviendo para disfrutar el ambiente de tranquilidad y energía positiva.