La casa es perfecta. Esta equipada con todo tipo de detalles y la cocina tiene todos los utensilios necesarios.
Las habitaciones muy grandes y con muchísimas camas.
Yoli, la dueña de la casa, más amable imposible. Cercana y servicial para cualquier duda.
Lo único negativo que se podría decir, es que el tráfico se escucha por la noche en las habitaciones y las campanas de la iglesia, solo descansan de 00:00 a 7;00 am. Pero de eso no tiene culpa la propietaria.
Las habitaciones muy grandes y con muchísimas camas.
Yoli, la dueña de la casa, más amable imposible. Cercana y servicial para cualquier duda.
Lo único negativo que se podría decir, es que el tráfico se escucha por la noche en las habitaciones y las campanas de la iglesia, solo descansan de 00:00 a 7;00 am. Pero de eso no tiene culpa la propietaria.