Nos alojamos ocho personas y con nosotros venía un perrito de raza pequeña. En primer lugar los dueños super atentos y muy amables dispuestos hacerte la estancia lo más agradable posible. En cuanto a la casa una maravilla y decorada con muy buen gusto, no falta detalle y muy bien equipada en cuestión de menaje. Los exteriores una pasada, las fotos no desmerecen. En fin se podría resumir que es un vergel en medio de un desierto.
Repetiremos seguro.
Repetiremos seguro.