Valdicimbrio es una casa rural auténtica y con sabor a tradición. Es un lugar muuuuy tranquilo y con habitaciones muy confortables y chulas. Pero lo que más destaco es el trato de Joaquín, su propietario, muy atento con los huéspedes y siempre aportando su conocimiento de la zona para aconsejarte rutas por pueblos o el Hayedo de Tejera Negra. Me ha gustado mucho la casa y la zona en la que está, con mucho que ver y hacer.