Sin duda la Calma de Rita es uno de esos lugares de los que despedirse resulta muy difícil. Cuidado hasta el más mínimo detalle, tanto en la decoración como en el trato, hemos pasado un fin de semana perfecto.
Si a eso le añadimos el trato recibido por Montse, que nos ha hecho sentir como en casa, cuidándonos en cada momento y preocupándose de que todo fuese de nuestro agrado, tenemos muy claro que volveremos y pronto!
Si a eso le añadimos el trato recibido por Montse, que nos ha hecho sentir como en casa, cuidándonos en cada momento y preocupándose de que todo fuese de nuestro agrado, tenemos muy claro que volveremos y pronto!