Estuvimos pasando con la familia los días 23 y 24. La casa está genial, tal cual se ve en las fotos, cómoda y acogedora, rústica y moderna a la vez, decoración original, con todos los útiles necesarios y más. La atención de los anfitriones también a destacar, Rosa y su marido se prestaron ante un pequeño problema que resolvieron enseguida. La zona muy tranquila, sin ruidos, para disfrutar y estar a tu aire.
Volveríamos a repetir sin duda
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