Estuvimos 3 días y fue una maravilla, la casa está hecha con un cariño y trabajo enorme, nos trataron como en casa, lo que hiciera falta. Tiene todas las comodidades posibles y para desconectar lo recomiendo. Se ha convertido en mi lugar preferido para recargar pilas, y eso que me pilla casi a 3 horas. Pero merece la pena.