Estuvimos de vacaciones una semana en la casa El piñar y la verdad que fue todo sobre ruedas. La casa es enorme, al igual que las habitaciones. Con zonas exteriores ideales para los niños y perros. En cuanto al trato, muy familiar, tuvimos un par de dudas y necesidades que fueron solventadas rápidamente, ya que los propietarios viven cerca de la casa.
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