Mi pareja y yo pasamos un fin de semana estupendo, en un ambiente relajado. Las casas, están pegadas al pueblo, ideal para comer en algún restaurante de Prado del Rey, pero a la vez parece que te encuentras en el campo debido al estupendo jardín que tienen. La piscina y la zona de niños son ideales por si vas con niños. Los propietarios muy simpáticos y atentos. Seguro que repetiremos.