El fin de semana pasado para mí fue un placer. Tuve oportunidad de disfrutar de la casa de Keka. Salir del pequeño piso en que vives en tu ciudad y encontrar una casa de espacios amplios, luminosa, con una ubicación excepcional junto al lago de un precioso pueblo como es Arcos de la Frontera es un auténtico regalo para los sentidos.
La casa es realmente acogedora, con una buena chimenea (de las que calientan de verdad) y un buen número de libros en las estanterías (Jack London, Robert Louis Stevenson... en fin, de esos que invitan a leer).
Keka, su dueña, nos recibió y se preocupó en todo momento por que nuestra estancia fuera realmente cómoda. Me hizo sentir como si estuviera en mi propia casa.
Muchas gracias por los molletes también, Keka. Un besazo
La casa es realmente acogedora, con una buena chimenea (de las que calientan de verdad) y un buen número de libros en las estanterías (Jack London, Robert Louis Stevenson... en fin, de esos que invitan a leer).
Keka, su dueña, nos recibió y se preocupó en todo momento por que nuestra estancia fuera realmente cómoda. Me hizo sentir como si estuviera en mi propia casa.
Muchas gracias por los molletes también, Keka. Un besazo