El mejor fin de semana rural que he pasado. Las condiciones de la casa perfectas, muy limpia, estaba acondicionada con todo, muy acogedora y el pueblo muy bonito. Fuimos un grupo de amigos y no paramos en todo el finde, rutas de senderismo y mucha vegetacion. María, la propietaria majísima, nos trajo un bizcocho el primer dia, cosa que en anteriores casas no hacian. Un gran detalle y muy atenta. Repetiremos, eso está claro.