Estuvimos el finde del 28 al 30 de enero. Diez personas en total entre abuelos, padres y nietos. Es la primera vez que alquilábamos un alojamiento rural para reunirnos toda la familia ya que vivimos en comunidades autónomas muy distintas. Ha sido una experiencia fantástica. La casa ha cumplido nuestras mejores expectativas: amplísima, súper limpia, llena de detalles... una gozada para los más pequeños y también para los mayores. María José, la dueña, nos ha colmado de atenciones. En fin, todo ha resultado fantástico. Lo recomiendo sin ninguna duda.