A la casa no le hacen justicia las fotos. Lo más impresionante son los dos caballos que están en la finca, son como dos perros grandes. La casa está muy bien equipada, y la finca es espectacular.
Tranquilidad absoluta, solo con el ruido de los pájaros y la leña quemándose en la chimenea.
La casera (Idoia) estuvo preocupada en todo momento para que no nos faltara de nada y Paco un señor atentisimo.
Volveremos seguro lo antes posible.
Tranquilidad absoluta, solo con el ruido de los pájaros y la leña quemándose en la chimenea.
La casera (Idoia) estuvo preocupada en todo momento para que no nos faltara de nada y Paco un señor atentisimo.
Volveremos seguro lo antes posible.