Nos hemos alojado del 29 al 31 de enero de 2017.
La estancia ha sido increíble y de lo más relajante.
La casa está en el medio del campo,por lo que se puede descansar muy bien.
Hemos ido con nuestro perro, y muy bien, ya que es una finca y pudo pasear a sus anchas.
Además tenían dos caballos muy buenos, y simpáticos.
Idoia y su marido han sido muy amables,cómo no entraba nadie hasta el día siguiente, nos dejaron salir más tarde.
Ha sido una estancia muy buena, y desde luego tenemos pensado volver.
Muchas gracias por todo:)
La estancia ha sido increíble y de lo más relajante.
La casa está en el medio del campo,por lo que se puede descansar muy bien.
Hemos ido con nuestro perro, y muy bien, ya que es una finca y pudo pasear a sus anchas.
Además tenían dos caballos muy buenos, y simpáticos.
Idoia y su marido han sido muy amables,cómo no entraba nadie hasta el día siguiente, nos dejaron salir más tarde.
Ha sido una estancia muy buena, y desde luego tenemos pensado volver.
Muchas gracias por todo:)