Cal Monjo

Cal Monjo es un sitio perfecto para desconectar y relajarte. La casa grande, limpia y con todo lo necesario. Cuando llegamos, incluso nos dejaron huevos de la zona en la cocina, para poder desayunar tortilla. La piscina y la barbacoa perfectas, y el paisaje y los animales de la zona nos encantaron. Un dia mientras comíamos fuera incluso vimos un ciervo. Y los propietarios amables y muy atentos en todo momento. Una experiencia perfecta que repetiremos pronto, seguro. Muy recomendable!