Seguros para casas rurales

Para tener la tranquilidad de que pase lo que pase en nuestra casa rural el seguro que tenemos contratado va a responder como nos gustaría, es importante que los propietarios elijan la mejor compañía.Pero a la hora de contratarlo surgen muchas dudas ya que son varios los factores que debemos tener en cuenta, por lo que no es una tarea fácil. Una buena póliza que responda ante posibles problemas en tu alojamiento te evitará gastos extra y te aportará tranquilidad. En este artículo vamos a resumirte que debes valorar, para que compares entre las diferentes compañías de seguros cuál es la que más se ajusta a lo que tu casa u hotel rural necesita.

Coberturas a tener en cuenta

No todas las casas son iguales ni todas las aseguradoras ofrecen lo mismo. Algunas tienen productos más genéricos y otras cuentan con coberturas más específicas que en algunos casos también varían según la legislación de la comunidad autónoma. Lo más importante para acertar con tu elección es que el seguro tenga en cuenta las peculiaridades de tu alojamiento.

Para empezar, tienes que valorar qué tipo de protección es la que necesitas según las características de tu alojamiento:

• ¿Se trata de una casa con gran capacidad o por el contrario es pequeña para 2-4 personas?
• ¿De qué año es la finca? ¿Es antigua y necesita más mantenimiento o es de nueva construcción o ha sido reformada recientemente?
• ¿Se encuentra dentro del pueblo o en un entorno aislado donde puede haber más riesgo de robos?
• ¿El propietario o propietaria vive cerca del alojamiento o se encuentra en otra provincia o comunidad autónoma?
• ¿Qué tipo de servicios extra ofrece la casa? Piscina, jacuzzi, huerto, barbacoa, parking privado, parque infantil…
• ¿Ofreces a tus clientes algún tipo de regalo de bienvenida con productos alimentarios como bebidas o embutidos locales?

Después, toma nota de todos los imprevistos que pueden surgir en tu casa rural y valora, según tu experiencia, qué es lo que más necesitas:

• Robos, averías o vandalismo: Aquí las compañías de seguros hacen dos distinciones. Por un lado, los “pequeños” robos y por otro los actos vandálicos que en la mayoría de las ocasiones requieren una denuncia ante la guardia civil. También tienes que valorar que bienes de tu casa y que valor económico deseas asegurar, así como si estás dispuesto a asegurar los bienes de tus huéspedes.
• Vehículos: Algunas casas incluyen durante la estancia el uso de bicicletas, quads, etc. ¿es tu caso? Si es así tendrás que decidir si quieres asegurar este tipo de vehículos o cualquier otra actividad de ocio de forma adicional.
• Fontanería: Se trata de uno de los servicios más demandados por los propietarios de casas rurales, ya que las tuberías o desagües soportan un uso continuado y están expuestos a más desgaste. Los problemas más comunes son los atascos, roturas, heladas o reventones.
• Daños eléctricos: Suelen producirse por sobrecargas en la red y provocan desperfectos en cuadros y aparatos eléctricos y en la instalación eléctrica en general. También suelen ser comunes los cortes de luz que pueden conllevar la pérdida de los alimentos o la rotura de electrodomésticos.
• Consumo de alimentos: Tal y como hemos mencionado anteriormente, en el caso de que decidas ofrecer a tus huéspedes un welcome pack con productos locales sería interesante que tu seguro también cubriera las posibles reclamaciones por el consumo de estos.
• Siniestros y catástrofes: Aunque lo normal es pensar que nunca nos va a pasar a nosotros no debemos descartarlo. Dependiendo de las coberturas que tengamos contratadas nos cubrirá más o menos. Las más comunes son: incendio, inundación, rayos y fenómenos atmosféricos como lluvia, viento o nieve.
• Posible incendio: Un incendio o la caída de un rayo pueden ser riesgos que debas tener en cuenta, especialmente si tu alojamiento se encuentra en una zona con alta probabilidad de tormentas o fenómenos atmosféricos extremos o si está rodeado de montes, prados o bosques.
• Responsabilidad civil: Toda persona física o jurídica es susceptible de producir un daño a un tercero, ya sea por acción, omisión o negligencia. Respecto a esto debes consultar si es obligatorio en tu comunidad contar con este tipo de protección. Aún así te recomendamos incluirla en tu seguro para evitar posibles problemas, ya que cubren daños materiales o de otra índole a terceros. En el caso de los menores de edad debes saber que son los padres los responsables de los daños causados por sus hijos.
• Incapacidad Laboral Temporal (ILT): En caso de una baja laboral por parte del propietario, los ingresos del negocio no se verán afectados.

Compañías de seguros

Es importante revisar bien todas las coberturas para saber qué compañía es la que más nos conviene en nuestro alojamiento rural. Además, debes saber qué condición va adherida a cada una de ellas y, ¡no te olvides de leer la letra pequeña! Aunque para estos casos siempre es determinante el precio, a veces lo barato sale caro, por eso te aconsejamos que lo estudies detenidamente. También es importante que tengas en cuenta la experiencia de otros propietarios. Si conoces a otros propietarios del sector pregúntales que te recomendarían.

Para ponértelo más fácil y darte un punto de partida hemos recopilado algunas de las compañías más conocidas que consideramos ofrecen servicios interesantes. A partir de aquí, el trabajo de valorar qué seguro contratas para tu alojamiento rural ya solo depende de ti:

¿Cuál es el mejor seguro?

Antes de decidirte debes meditar las diferentes propuestas y valorar cuál es la que mejor te conviene. Para ello te recomendamos tomar nota de estos consejos.

• Solicita un presupuesto real del tipo de seguro que quieres contratar para poder estudiarlo con tranquilidad.
• Revisa bien el documento para conocer el tipo de póliza que vas a contratas y sus condiciones.
• Si tienes cualquier duda pregunta a tu comercial y plantéale casos prácticos para saber cómo reaccionarían ante una posible situación.
• Por supuesto no olvides leer la letra pequeña, ya que aquí encontrarás mucha información sobre el tipo de seguro y así no te llevarás sorpresas en el futuro.
• También te recomendamos comparar los precios y servicios entre varias compañías antes de tomar tu decisión.
• Cuando hayas tomado una decisión pregunta a otros propietarios sobre esa compañía para valorar su experiencia.