“Decido llevar el nombre de la Siberia allá donde no se conoce”

Emiliana Sánchez nos cuenta su reciente experiencia como propietaria de la Casa Rural El Portezuelo, situado en La Siberia (Extremadura). En 2011, decide arrancar este negocio y desde entonces no ha parado. Ofrece actividades tan variadas como senderismo, rutas a caballos, recogida de setas, etc., e incluso un servicio de canguro. También cuenta con un servicio que te trae la lista de la compra del supermercado a casa. Con el paquete relax, un fisioterapeuta se desplaza hasta la casa para hacerte disfrutar de un masaje. ¡No perdáis detalle!

Este proyecto nació de su inquietud por promocionar la Siberia. Se trata de una zona que alberga una belleza paisajística sin comparación y donde destaca su riqueza en flora y fauna. La Siberia ofrece al visitante lugares como la Reserva Regional de Cíjara, donde campean ciervos, corzos gamos, jabalíes y otras especies cinegéticas. Cabe señalar la gran cantidad de agua embalsada donde confluyen los ríos Guadiana y Zújar. Es por ello, que en la Siberia cuentan con 5 grandes pantanos que, en palabras de Emiliana, es “todo un orgullo que mostrar al viajero”. En general, se trata de una rica comarca en yacimientos arqueológicos, y otros tesoros, que merecen la pena visitar. Pero, a pesar de tener tantas riquezas, Emiliana nos cuenta que la Siberia no puede presumir de ser un destino turístico tan visitado como esta comarca merece. Y es por este motivo por el que decide dedicarse a una de sus grandes pasiones: “promocionar nuestra tierra, nuestras costumbres, llevar el nombre de la Siberia allá donde no se conoce”.

Sin embargo, su experiencia con la Administración no ha sido tan buena. “Cuando decido montar una casa rural, me pongo en contacto con el Centro de Desarrollo Rural y con la Junta de Extremadura para emprender este apasionante proyecto. Sin embargo, no ha sido fácil. Alguna que otra traba me he encontrado por parte de algunas administraciones por las que he pasado. Había que procurar un alojamiento de calidad para el viajero y lo hemos conseguido”, concluye.

Según Emiliana, el turismo rural supone una forma asequible de viajar

En cuanto a su percepción de la situación que atraviesa el turismo rural en estos momentos, Emiliana dice que “durante el mes de abril, las casas rurales en Extremadura registraron una ocupación del 24%, seis puntos más que la media nacional. Pero lo cierto es que no es igual de fácil promocionar cualquier zona de Extremadura. El viajero ya sabe que ofrece el norte de Cáceres, por ejemplo, estamos hablando de una zona bien explotada turísticamente. Ahora bien, ¿sabe qué ofrece la Siberia? Creo que no, que debemos aunar esfuerzos desde distintos organismos, como la Junta de Extremadura, ayuntamientos y empresarios, para diversificar el turismo y vender bien nuestra tierra. No es fácil alquilar un alojamiento en una comarca que no se vende a nivel regional”, añade.

Asimismo, “no olvidemos tampoco los momentos económicos por los que atraviesa nuestro país, un gran numero de viajeros, ahora no puede viajar por problemas económicos. Aunque precisamente ese registro al alza que ofrece el sector turístico rural se debe, en gran medida, a que supone una forma de viajar económica y asequible”, comenta. Por ejemplo, “a la casa rural el Portezuelo, llegan las familias a pasar el fin de semana, ellos mismos preparan sus comidas y traen preparadas las bebidas. Ello supone un ahorro bastante importante y en un medio de convivencia que no se puede comparar con la habitación de un hotel”.

Su experiencia más extraña con un huésped: “Pensaba que era una persona huida de la justicia e incluso hablé con la Guardia Civil. Por supuesto todos mis miedos eran infundados”.

Emiliana, nos ha contado algunas de sus experiencias más curiosas desde que se ocupa de llevar la casa rural. Nos cuenta que una clienta francesa se quedó una noche sola en el Portezuelo. Continúa explicando que “le pregunté si no la daría miedo y me respondió: Miedo ¿de que? Después me dijo que el coche que llevaba era de alquiler. Durante el tiempo que estuve con ella en la casa, ella no tendría miedo, pero a mi me temblaban las piernas. ¿Quién era esa señora? ¿Por qué viajaba en coche de alquiler? ¿Por qué se quedaba en una casa sola en medio del campo? En mi cabeza toda una película, digan merecedora de un Oscar. Yo olía el misterio, lo veía clarísimo. Pensaba que era una persona huida de la justicia. Hice mi parte de viajeros e incluso hablé con la Guardia Civil, para que estuviese pendiente. Por supuesto mis miedos eran infundados, la chica venía de un viaje de negocios y su coche estaba en el aeropuerto. Por eso, viajaba con coche de alquiler, porque su empresa se hacia cargo de todos sus gastos en España”.

Otros clientes que le gustaría destacar, son aquellos que nacieron en Fuenlabrada, se trasladaron a otro lugar a vivir y ahora ya no tienen casa en Fuenlabrada de los Montes. Emiliana tiene clientes que llevaban bastante tiempo sin visitar su pueblo porque ya no tenían casa. Ahora se quedan en casa rural el Portezuelo a un buen precio y no tienen que asumir el mantenimiento de una casa cerrada. Cada vez que llega este perfil de clientes al Portezuelo, me encuentro muy satisfecha con mi labor.