4 paisajes para descubrir en otoño

Tras un verano en la que el calor ha hecho acto de presencia con más fuerza de la que muchos hubiésemos deseado, ha llegado octubre y con él nos vamos a adentrar en pleno otoño.

La estación de las hojas caídas, los bosques dominados por los colores rojo, marrón y los resto de verde que se conservan y sirven de inspiración para poetas y demás artistas, cuya simbología se observa en las diferentes obras. Es también un momento ideal para hacer turismo debido a la caída de las temperaturas y hace más agradable la estancia en el destino elegido.
Desde el punto de vista gastronómico es una época de bonanza para los amantes del buen comer, con productos de estación como los diferentes tipos de setas que crecen en los campos, frutos como castañas, boniatos o las típicas calabazas, especialmente típicas de la fiesta anglosajona de Halloween.
Es por tanto un momento del año en el que es especialmente recomendable viajar a lugares naturales para poder disfrutar de este cambio en el paisaje en primera persona, y por este motivo vamos a recomendar algunos destinos donde poder disfrutar de esta experiencia.

Bosque Muniellos, Asturias

El bosque de Muniellos se encuentra en Cangas del Narcea, en el extremo sureste de Asturias. Se trata de un bosque que en el año 2000 fue declarado Reserva de la Biosfera por la UNESCO, lo que da una muestra de la importancia de este espacio y hace que sea necesario pedir una autorización para poder acceder al interior.
En este bosque se pueden encontrar varios monumentos y lugares de interés que merecen la pena ser visitados, como por ejemplo el Santuario del Acebo, el hayedo de Monasterio de Hermo o el impresionante Valle de Naviego.
Muy cerca de esta maravilla de la naturaleza se encuentra el Gran Hotel Rural Cela, una antigua casona asturiana de gran tamaño construida en el año 1902 en la localidad de Belmonte de Miranda que ha sido reformada para poder ofrece todas las comodidades y crear un espacio perfecto para visitar la región y disfrutar de la belleza de la región mientras se llevan a cabo diferentes actividades como senderismo o piragüismo.

Fageda d’en Jordà, La Garrotxa, Cataluña

Se trata de un paisaje de película, perfecto para dar largos paseos durante el otoño. Se encuentra en la provincia de Girona, en la zona del prepirineo catalán, en un terreno volcánico donde destaca el impresionante hayedo que crece a una altitud de 550 metros en unas condiciones impensables para otro tipo de vegetación, favorecido no obstante por la humedad y el drenaje del suelo volcánico.
Una excelente opción para explorar este magnifico entorno en un agradable paseo en globo y pudiendo disfrutar de todas las comodidades es la Masía La Palma, un alojamiento que se encuentra en la localidad gerundense de Espinavessa. Se trata de una construcción de 1830 en la que pasar una excelente estancia con unos magníficos servicios de spa perfectos para relajarse tras un día disfrutando del otoño en la Fageda d’en Jordà, La Garrotxa.

Parque Natural de la Laguna Negra y los Circos Glaciares de Urbión, Soria

Se trata de uno de los lugares más singulares de la geografía española, un espacio dominado por altos picos que han sido moldeados con el paso de los siglos por la acción incesante de las lluvias y el hielo presente en este paisaje glaciar.
El Parque Natural de la Laguna Negra y los Circos Glaciares de Urbión se encuentra en el centro de la provincia de Soria, en sus 4.617 hectáreas de terreno se encuentran algunos de los picos más elevados de la provincia como el Urbión, con 2.228 metros de altitud.
Se trata de un espacio catalogado como Zona de Espacial Protección para las Aves (ZEPA), Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y forma parte de la Red Natura 2000, lo que da una muestra de la singularidad del paisaje.
Por aquí se pueden disfrutar de excelentes rutas para practicar senderismo mientras se recorre la zona, visitando los diferentes lagunas glaciares y observando unos espectaculares paisajes de la alta montaña mediterránea ibérica con una gran diversidad de plantas y animales para observar.
Cerca de este espacio de tanta belleza se encuentran varias poblaciones en las que visitar monumentos y encontrar servicios de todo tipo, entre ellos restaurantes, bares o alojamientos como El Morendal Spa, en el pueblo de Almarza. Se trata de un acogedor hotel con encanto cuya edificación en su origen era una fábrica de harinas. Aquí se puede disfrutar de una estancia en la que disfrutar no sólo del entorno, sino también de las exclusivas instalaciones y los servicios de spa, baños turcos, piscinas de hidromasaje y varios tipos de masajes.

Parque Natural del Alto Tajo, Guadalajara

Entre el sureste de la provincia de Guadalajara y el nordeste de la de Cuenca encontramos el Parque Natural del Alto Tajo, un espacio de unas 105.721 hectáreas que se suman a las 68.824 hectáreas de Zona Periférica de Protección.
Se trata de un terreno con una gran diversidad climática, geológica y topográfica en el que se encuentran una gran cantidad de hoces y bosques que surgen al paso del río Tajo y sus afluentes.
Al tratarse de un parque tan extenso, son muchas las actividades que se pueden realizar en su interior y con las que explorar la zona, su flora, fauna y paisajes. Se pueden encontrar muchas rutas donde alcanzar puntos de interés como las cuencas de los ríos Tajo, Guadalaviar y Júcar, el Barranco de la Hoz o los Montes Universales en los que practicar actividades como ciclismo de montaña, barranquismo o descenso de cañones.
Debido al la gran extensión que ocupa este parque natural, en su interior se encuentran hasta 44 municipios como Villanueva de Alcorón, Zaorejas o Corduente. Son varias las opciones para alojarse en la zona, pero es especialmente recomendable para pasar una tranquila estancia con todos lujo de detalles y servicios el Hotel Rural Los Ánades, en Abanades, pequeña localidad de Guadalajara. Este alojamiento cuenta con unas magníficas instalaciones pensadas para que los huéspedes puedan explorar la zona desde un punto céntrico, y de vuelta al hotel puedan disfrutar de un excelente servicio de spa, billar o una espectacular biblioteca de estilo inglés.
Estas son nuestras recomendaciones para afrontar el cambio de estación de la mejor manera posible, olvidando el triste final del verano y centrándose en que se avecina una de las épocas más mágicas del año, especialmente en el contexto adecuado.