Hemos estado 4 noches en esta preciosa casa. Desde el minuto 1 Carmen consigue transmitirte todo el amor y pasión que hay en este proyecto. Deformación profesional o no, está claro que pretenden y consiguen que vivas la estancia preocupándote únicamente de disfrutar el Sobrarbe, su gente, su arquitectura, su gastronomía y su naturaleza. A la casa no se falta de nada: desde una cocina equipada y completa hasta el mínimo detalle de limpieza y ante cualquier duda o necesidad Carmen está dispuesta a ayudar. No hemos tenido problema ninguno para comer en cualquier terraza con el peludo de Bran. Hay millones de rutas por hacer y sin duda 4 días son pocos. Lo mejor: sentarse por la noche en el silencio del patio viendo las estrellas y escuchando las ramas de los árboles. Repetiremos sin dudarlo esta vez más tiempo!
PD: no os perdáis la visita que hace Carmen sobre la historia de la casa y de leer el libro que ella y Thibault han redactado de la casa; espectacular comprender la cultura del lugar a través de su arquitectura! Un abrazo enorme de Guille, Alba y Bran!
PD: no os perdáis la visita que hace Carmen sobre la historia de la casa y de leer el libro que ella y Thibault han redactado de la casa; espectacular comprender la cultura del lugar a través de su arquitectura! Un abrazo enorme de Guille, Alba y Bran!