Semana del 3 al 10 de agosto, tiempo perfecto, casa perfecta y dueños encantadores. Fernando, Isabel, Marimar... Pendientes de todo sin agobiar. Nos habían preparado unos mapas hechos por ellos con las rutas más interesantes ¡y nos las hicimos todas!. Son gente sencilla que se nota que aman su tierra y lo que hacen. Cuando llegas tienes huevos caseros, leche y café, un detalle que nunca había visto en otras casas, ( y somos habituales del turismo rural). El jardín trasero de la casa es precioso, mimado y cuidado al detalle... ¡Hicimos barbacoa dos noches!. Es una zona muy tranquila, y hay muchísimas cosas que ver sin hacer demasiados kilómetros. Recomendable absolutamente!!!