Hemos pasado unos días de relax absoluto, rodeados de una naturaleza que te atrapa. La ubicación es espectacular, con las casitas al lado Del Río, ideal para ir con niños o mascotas, además de estar rodeados de numerosas rutas de senderismo. Como enclave natural, el acceso en coche cuenta con numerosas curvas que te invitan a disfrutar del paisaje durante el trayecto. Además, al lado de las casas hay un balneario donde se come bastante bien, eso si, entre semana la cocina cierra muy pronto y si quieres cenar tienes que desplazarte hasta Yeste. En resumen, una experiencia fantástica para disfrutar tanto en pareja, como con amigos o niños.